El HDD (hard disk, en español unidad de disco duro mecánico) es una parte física e integrante de los ordenadores y portátiles responsable del almacenamiento de datos. Su memoria es no volátil, es decir, los datos no se pierden en caso de que el ordenador se apague. Todos los datos son grabados en discos magnéticos, y cuanto más finos sean los discos, mejor será la grabación. Por eso los discos del mismo tamaño pueden tener capacidades de almacenamiento muy diferentes unos de otros (con varios platos). Estas unidades han evolucionado desde que se construyeron por primera vez a principios de 1960, doblando la capacidad cada 18 meses. Esta evolución también ha provocado una caída en los costes de producción y, por consiguiente, una caída en el precio final del producto.
Las computadoras que normalmente utilizan discos magnéticos son los ordenadores de escritorio, los All-In-One (Todo en uno), los ordenadores portátiles y los servidores de empresas. Ellos necesitan este tipo de discos para realizar sus funciones que usualmente son más exigentes que en las tablets y smartphones.
El SSD es un poco diferente. Su sigla significa “solid state drive”, en español “unidad de estado sólido”, su construcción se basa en un circuito integrado semiconductor, hecho en un sólo bloque junto a una controladora que es la encargada de manejar a todos sus componentes. A diferencia del disco duro convencional, donde el almacenamiento se realiza en discos magnéticos, los SSD son capaces de usar memoria flash, memoria RAM o la propia controladora. Sin embargo, en lugar de una capa magnética en los discos, los datos son almacenados en los chips interconectados de memoria que retienen los datos incluso cuando no hay energía presente.
Los smartphones, las tablets y portátiles son los dispositivos que más utilizan los discos SSD. Sin embargo, no podemos olvidar también a las cámaras digitales de fotos, que emplean esta clase de almacenamiento para dar un mayor tiempo de respuesta en sus fotos y almacenar un número mayor de imágenes pero en tarjetas SD o microSD. Estos aparatos citados no tienen una memoria muy grande, sin embargo, necesitan que el tiempo de respuesta sea lo más rápido posible y ahí entra la importancia de la Class de cada tarjeta.
¿Cuáles son las diferencias y por que un usuario puede preferir uno u otro?
– Capacidad: Las unidades SSD con mayor almacenamiento pueden ser muy caras. Mientras que un TB es considerado como una unidad de disco duro estándar básica para cualquier sistema, las preocupaciones por el precio te pueden hacer optar por un SSD de menor capacidad. Los equipos para ver y almacenar vídeos, fotos y música van a exigir aún más capacidad. Básicamente, cuanto más capacidad de almacenamiento, más archivos puedes guardar en tu ordenador. Los discos duros tienen más capacidad y son más baratos. Siempre recomendamos utilizar un SSD para instalar el sistema operativo más aplicaciones básicas mientras el disco duro convencional guarde todos tus datos. Aunque si te puedes permitir varios discos SSD de 1TB, adelante!
Se van anunciando SSD con mayor capacidad de 1TB, así que es de esperar que en los próximos años salgan modelos con mayor tamaño y su precio siga bajando aun más. Poco a poco va ganando en nuestra comparativa SSD vs HDD el disco de estado sólido.
– Fragmentación: Por causa de sus superficies de grabación rotativas, las superficies de los discos duros normales trabajan mejor con archivos más grandes grabados en bloques sólidos. De esta forma, la aguja de la unidad puede comenzar y terminar su lectura en un movimiento continuo. Cuando los discos duros comienzan a llenarse demasiado, los archivos grandes pueden extenderse alrededor del plato del disco, algo conocido como fragmentación, perjudicando la velocidad de lectura y escritura de datos en discos duros. Mientras tanto, las unidades de estado sólido no tienen este problema, ya que la ubicación física de la grabación de los archivos no importa tanto. Así, las unidades de estado sólido son extremadamente más rápidas y es muy importante desactivar las fragmentaciones automáticas en tu sistema operativo.
– Ruido: Hasta el disco duro más silencioso emitirá un leve ruido (5.200 RPM) cuando esté en uso. Los discos duros más rápidos (7200 ó 10.000 RPM) , incluso, van a hacer más ruido que los más lentos. Las unidades de estado sólido no hacen ningún ruido, principalmente porque no tienen partes mecánicas.
En efecto, no existe una mejor manera de almacenar tus archivos. Todo va a depender de lo que necesites. Si tu necesidad es la de almacenar grandes vídeos, grabados en alta calidad, los SSD no son recomendables a día de hoy, ya que el tamaño de los vídeos sería muy grande. No obstante, en una tablet, donde el tamaño del aparato es pequeño y el tiempo de respuesta debe ser muy rápido, los SSD se hacen esenciales para este fin. Este es uno de los grandes puntos de esta comparativa SSD vs HDD.
¿Estás buscando un disco SSD de calidad y no sabes cual elegir? Te recomendamos la lectura obligatorio sobre los mejores SSD del momento. Encontrarás los mejores modelos, los más baratos, calidad/precio y nuestras reviews en Español más profesionales del sector informático.
– Tamaño físico: Como los discos duros tienen platos giratorios, hay un límite para lo pequeño que pueden ser en tamaño. Las unidades de estado sólido no tienen esta limitación, continuando a disminuir a medida que pasa el tiempo, pudiendo almacenar más de 100 GB en un espacio más pequeño que un pen drive. Si tienes poco espacio disponible o quieres un portátil más delgado y ligero, el SSD es la opción correcta. Ojo, que existen varios tamaños: 3,5″, 2,5″ y 1,8″.
– Durabilidad: Los SSD no tienen partes móviles, y por lo tanto, es más probable que mantengan tus datos seguros, en caso de que se caiga tu bolso de la computadora portátil o tu sistema sea afectado por un impacto mientras está funcionando. La mayoría de los discos duros funcionan a alta velocidad cuando están conectados. Además, incluso los sistemas de seguridad para impacto tienen límites, y las partes móviles también se desgastan más rápidamente. También hay varios estudios que han demostrado que puede fallar antes varios discos duros hasta que falle un SSD de calidad.
– Velocidad y rendimiento: Este es el lugar donde las unidades de estado sólido ganan por amplia ventaja. Un PC equipado con un SSD va a funcionar mucho más rápido, conectando en cuestión de cuatro ó cinco segundos. Un disco duro requiere tiempo para cargar especificaciones de funcionamiento, y continuará a ser más lento que un SSD durante el uso normal. Un PC o Mac con SSD es más rápido para la conexión, abre las aplicaciones más rápidamente, y tiene unrendimiento más rápido, en todo. Sea para la diversión, estudios o negocios, la velocidad puede ser una importante diferencia para el tipo de equipo que estás montando he aquí donde gana una vez más el SSD gana en nuestra comparativa entre SSD vs HDD.
– Precio: Las unidades de estado sólido son más caras que los discos duros en valor por GB, pudiendo costar por lo menos 50% más que los discos duros normales. Como los discos duros convencionales son más antiguos y desde el año pasado se han recuperado de los incendios de hace unos años, sus costes son menores. Pero la diferencia de precios entre discos duros y unidades de estado sólido tiende a estar cada vez reducida, en parte, gracias a la salida de tantísimos smartphone. En definitiva, un SSD es más caro sí, pero el rendimiento es extremadamente superior… es como comparar un Fiat punto de 60 caballos contra un Ferrari de 350 caballos.
Más información en: https://www.profesionalreview.com/2016/03/20/ssd-vs-hdd/
No hay comentarios:
Publicar un comentario